Solamente
La trascendencia, ¿Qué es la trascendencia? es más que la mancha de un helado en tu camisa, indicando que lo habeis comido. Dejar la huella en el pavimento fresco para que dure años y la gente lo vea o lo pise. Plantar un árbol que en invierno se congele y justificarse por haber hecho el intento. Regalar las migas a un mendigo de una vida que sobrellevamos.
Me pregunto muchas cosas, ¿de qué quiero estar orgulloso en mi vida? De una carrera, de un flic flac seguido de un mortal, de mis cicatrices en la piel, de algunas palabras pronunciadas, de unos números que me evaluaron. No lo creo, o tal ves sí.
Nadie da lo que no tiene, no puedo trascender en alguien si no he trascendido en mí, pero ¿cómo hacerlo? y creo que la respuesta es más sencilla que la pregunta, pues cada uno sabemos la manera, ¿Qué es lo que te gustaría cambiar o mejorar de ti? una cuestión digna de meditar en varias ocasiones, y la respuesta siempre involucra un reto, un crecimiento, un golpe contra la pared, una negación, un aliento o un suspiro, mil y un cosas puede ser pero jamás un error.
¿Cómo trasciende un egipcio? perdonándose por los errores, cerrando círculos inconclusos, sanando heridas abiertas, repitiendo Yo Soy, conociéndose, recordando o imaginando su origen y su misión, haciéndose preguntas y mirando al cielo. Un guerrero egipcio siempre inhala antes de una batalla y gira su cabeza para asegurarse de que no está sólo, pues nunca lo ha estado.
Yo trasciendo en mí para hacerlo en los demás, tal vez algún día cambie la vida de otra persona, y espero que sea para bien, la esperanza siempre me da un sí, pues en mi camino grandes maestros me han enseñado y han girado mi vida dándome luz y más preguntas, siempre en la búsqueda y en el camino, como debe ser un guerrero de luz.
La fama y el prestigio no son sinónimos de trascendencia, simplemente son circunstancias y adjetivos en potencia, dibujar en el rostro de un niño una pequeña sonrisa, eso sí es un sinónimo. Las pequeñeces y los detalles pueden ser tan elementales, al grado que yo recuerdo en mi vida algunos momentos o detalles que ciertas personas tuvieron conmigo que casi podría asegurar, ellos ni siquiera se acuerdan o ni se dieron cuanta al hacerlos, pero que siguen cincelados en mi corazón, recuerdos que agradezco y miro al horizonte y simplemente se me ocurre sonreir por aquellos días que no importa ni cuándo ni dónde, sólo sé que los disfruté a mi manera.
Pondré en acción algunas de mis ideas locas, y si me guío por la probabilidad y estadística alguna de ellas podrán dibujar alguna sonrisa o un detalle de gratitud, no importa a quién o si me lo demuestra, sólo basta con el hecho de haber trascendido en mí.
¿De qué quiero estar orgulloso? En definitiva de mi locura....
Amor, luz y paz entre nosotros!!!
0 comentarios:
Publicar un comentario