Step

Pasos dados, conocimiento recorrido.

Todo hecho o acontecimiento ofrece aprendizaje, sea cual sea tu percepción del mismo, puede que pienses que es una experiencia negativa, un problema, obstáculo, error, mala decisión, sea lo que sea lo has vivido y en ti queda el siguiente paso, ¿qué hacer con ese conocimiento, esa experiencia?

Me di cuenta de una característica mía, algo que siempre hacía casi sin darme cuenta, jamás me detuve a pensar al respecto y es que siempre traté de resolver la vida de alguien más. Si alguien platicaba con migo, siempre trataba de resolver lo que sentía, incluso después de la chala mientras me encuentro sólo, pienso en los problemas de los demás, en posibles soluciones, en puntos de vista que se les escapa a mi hermanos, padres, amigos o conocidos e incluso desconocidos.

Un detalle me hizo hacer conciencia sobre mi peculiaridad, y es que cierto día caminando por la tarde vi una veterinaria que tenía días de ser inaugurada, no había gente o posibles clientes, se veía sola y ese detalle me causó desasosiego, cual fue mi sorpresa que después de 10 minutos me di cuanta que pensaba alternativas para al dueño para activar la clientela de su negocio. Me di cuenta que me causaba opresión en el pecho darme cuenta que parecía ser un fracaso el lugar, me dio cierta nostalgia saber que después de haber invertido mucho dinero en acondicionar el lugar, mercancía, renta, medicamentos, publicidad etcétera, ni siquiera sabía quién es el dueño del local y yo ya había creado estrategias en mi mente para tratar de solucionar una problemática que podía o no ser real.

Y me di cuenta que tenía muy a menudo esa actitud, con personas que no conocía y que jamás crucé palabras, que tal el chofer de un camión, los novios que discuten, los niños que pelean, lo peor del caso es que es completamente cierto, a cada momento invertía mi tiempo en pensar soluciones a situaciones que veía; pero en el caso de mis conocidos o familiares la cosa se ponia peor, pues me involucraba sentimentalmente y terminaba siendo parte del problema y la solución del mismo, gastaba mucha energía pensando en los demás y en su bienestar. ¿no podré estar más loco verdad? pues sí, así actuaba yo, y de pronto eso hacemos, tenemos reacciones o hacemos cosas que resultan tontas después de que eres consiente de ellas.

RESOLVER la vida de Alguien más!!!!!! como si tuviera la mía resuelta y no supiera que hacer con el tiempo restante.... Nadie puede dar lo que no tiene, si yo no estoy bien, no puedo hacer que los que me rodean estén bien, es tan básica esta afirmación y tan lógica, pues nadie puede repartir dinero cuando no cuanta con él. Resulta todo en ordenar prioridades, no puedo creer que primero pensaba en los demás antes que en mí, y eso no me convierte en el Padre de Calcuta, todo lo contrario, pues se pierde todo el sentido y el amor propio.

No puedes amar a alguien más si ni siquiera tienes amor por ti... ámate a ti primero y conocerás este sentimiento y ahora sí podrás amar a alguien más. Sabrás que el amor no es atar, ni pedir, ni soportar o enseñar.... simplemente es AMAR.

Ahora lo sé y ahora lo decido, pasos dados, conocimiento adquirido.

De Amarillo y Cabello recogido

Una chica singular, una amiga de chorcha de aquellas con las que el tiempo desaparece y la magia en las palabras aparece, temas miles y sonrisas incontables, bromas y comentarios incoherentes fueron la norma en nuestras charlas. Un poco de esto y un tanto de aquello.

Su mirar y el caminar te hacían voltear, su energía y viveza no pasaba desapercibida, rodeada de personas o el radio contestaba, pero siempre haciendo algo y nunca se quejaba. Un ser humano magnífico al que recuerdo con mucho cariño y aprecio, pues siempre tenía una sonrisa para compartir y en los momentos de estrés un comentario creativo que subía los ánimos.

El tiempo pasa cual relativo es, entre ocupaciones, trabajo y pésima administración de agenda perdimos contacto, un año, y pasaron los meses, año y medio y fue cuando la encontré de nuevo.

Sin esperar en un lugar muy concurrido de pronto apareció, una blusa amarilla llamativa, el cabello recogido y no recuerdo más de su atuendo, la vi de perfil y mi corazón dio un brinco de emoción, decidí acercarme y tomarla por sorpresa de espaldas, le tapé los ojos y al instante la solté, un abrazo instintivo resultó pero noté algo diferente en ella, de momento no sabía si fue su voz, o tal ves sólo mi impresión, las preguntas de rigor ¿cómo estás? ¿qué has hecho? no se hicieron esperar, más como de costumbre yo sus ojos miré, y fue ahí que descubrí que faltaba algo.

Hoy me pregunto ¿a dónde fue tu brillo?, miré tus ojos y no había mucho, te sentí apagada y confusa, fastidiada y casi derrotada, hoy con tristeza escribo estas palabras, pues no puedo entender porqué la gente renuncia a lo más valioso que tiene, no comprendo como te puedes olvidar de ti mismo, de tus sueños, anhelos, alegrías, ¿por qué sacrificas todo por un trabajo que te hace ser otra persona?

Abandona todo lo que quieras pero jamás a ti mismo, ¿a donde fue tu brillo? dime que sólo fue un mal día y que estabas cansada, inventa cualquier pretexto pero jamás repitas esa mirada, esos ojos que hablaban de felicidad los vi llorar sin lágrimas que derramar. Amiga espero volverte encontrar, sin palabras que cruzar espero que tus ojos me digan, ¡¡Aquí estoy más viva y costeña que nunca!!!